-
A 11 días del balotaje, el mano a mano de los compañeros de fórmula de Milei y Massa tuvo fuertes cruces y tensión.
El debate entre los candidatos a vicepresidentes, Agustín Rossi y Victoria Villarruel, fue el número preliminar del duelo verbal que protagonizarán el domingo Sergio Massa y Javier Milei en la Facultad de Derecho en una búsqueda voto a voto de cara al balotaje.
En un estudio repleto y con picos de casi 10 puntos de rating, desde el primero de los 4 ejes temáticos –Economía y Trabajo– el jefe de Gabinete intentó plasmar un tono muy distinto al que había mostrado el 20 de septiembre, en el primer debate antes de las generales, un mes después de las PASO, cuando Unión por la Patria había quedado tercero.
Lejos de la belicosidad de ese día, habló con un tono pausado y evitó tensar la discusión mano a mano con la diputada de La Libertad Avanza, que no evitó la confrontación, acusó de mentiroso a su rival en al menos 7 oportunidades y calificó la segunda vuelta como una opción entre la continuidad y el cambio.
Alineado con la estrategia discursiva de Massa, Rossi planteó -desde el minuto a disposición que los candidatos tuvieron para presentarse- que el 22 de octubre la sociedad había votado en contra de las propuestas del libertario. “La gente votó en contra de la motosierra de Milei”, señaló.
Villarruel eligió polarizar de entrada y centrar la discusión en el eje económico. “A partir de ahora todo lo que vas a escuchar es mentira. Cada una de las cosas que proponen, las podrían haber realizado en los últimos 4 años”, disparó la diputada.
Cruces y tensión
La dinámica más relajada del debate que permitió respuestas, derecho a réplica y 4 minutos de debate libre fomentó los cruces entre los candidatos y explicitó las estrategias de cada uno. “Milei dijo que Patricia Bullrich era una asesina ponebombas y a los dos días la abrazó y dijo que coincide con ella en un 90%. En los dos casos miente”, consignó Rossi en una de las pocas alusiones a la alianza de los libertarios con los halcones de JxC. “El candidato es Milei, no Macri”, explicaron los colaboradores del ministro coordinador.
Rossi se quejó por la agresividad de Villarruel y las interrupciones permanentes. “Es un debate, si viniste a monologar….Estoy indignada por la pobreza que hay en Argentina”, señaló la diputada, para justificar su tono. Señaló que el embajador argentino en China Sabino Vaca Narvaja es “un lacayo de los chinos” mientras que Rossi cuestionó la voluntad de Milei de romper relaciones o tomar distancia con Brasil y China.
Hubo pasos de comedia, como cuando Villarruel le recordó a Rossi que el 70% no había votado al oficialismo. “¿Y a ustedes? Los votó el 30 por ciento”, le devolvió el vice de Massa. Rossi se quejó por la dinámica del debate y los dirigentes de cada fuerza -entre los que había 5 ministros nacionales y los principales referentes libertarios- que los acompañaban se sumaron al murmullo.
Un formato más teatral
El formato del debate, más teatral y consensuado por ambos equipos y la producción, también permitió que los candidatos se hicieran preguntas cara a cara. Rossi le preguntó por la dolarización y Villarruel mencionó que el ministro tiene depósitos en dólares.
“Tu candidato dijo que iba a barrer con los ñoquis de La Cámpora”, recordó Villarruel sobre los dichos de Massa en 2015. Rossi contestó que había pasado mucho tiempo. “Prescribió”, sostuvo.
En el segundo eje sobre Seguridad y Defensa, la candidata de LLA destacó que viene de una familia militar y Rossi evocó sus gestiones como ministro del área, la creación del Fondef y el trabajo de las fuerzas de defensa durante la pandemia antes de acusar a su rival de “caranchear” con la muerte de militares en el sur. Las chicanas estuvieron a la orden del día. “En la Antártida no te quiso votar nadie. En las cárceles sí los votaron”, disparó Villarruel.
Al debatir el tercer eje de “Salud, Educación y Políticas Sociales”, la compañera de fórmula de Milei dijo que se adelantaría a Rossi y anticipó que en un eventual gobierno de LLA la educación y la salud seguirán siendo gratuitas, mientras el jefe de Gabinete aplaudía la ocurrencia. A la hora del cruce, la aspirante libertaria recordó que ningún funcionario del Gobierno se atienden en los hospitales públicos.
Paciencia no tan infinita
La paciencia del jefe de Gabinete se fue acabando con el correr de la emisión. “No es éste (que describiís) el país que vivimos. Querelo un poquito, dicen que es un país de mierda”, disparó Rossi.
-El problema son los 7 años de la dictadura, pero no quiero entrar en eso -amplió al final del tercer bloque el jefe de Gabinete´.
-No querés entrar, porque salís esquilado- le devolvió Villarruel.
Rossi no le hizo caso y al comienzo del último bloque “Justicia, Derechos Humanos y Transparencia”, rompió el hielo al recordar el terrorismo de Estado y la apropiación de hijos de desaparecidos y ponderó la tarea de Raúl Alfonsín en ese sentido, a quien Milei dijo aborrecer y a quien Villarruel había señalado como un “abogado de terroristas”, un detalle que recordó el candidato de UxP.
La compañera de fórmula de Milei enumeró algunas de las causas judiciales que salpicaron al kirchnerismo en el pasado y en el último gobierno del FDT. “Para el kirchnerismo, la Justicia, los Derechos Hmanos y la tansparencia son la muerte del fiscal Nisman, la AFI paralela de Rossi y compañía -contame después- la tragedia de Once, Emerenciano Sena, las fiestas en Olivos, los juicios por la expropaición de YPF, sueños compartidos, el misil y las balas ques que se te perdieron, lo sobreprecios de los autos de AYSA. Todo eso nos lleva a preguntarte como argentino si querés continuidad o cambio”, sentenció ayudada por sus apuntes.
Al final, sí se trensaron por el número de desaparecidos y se acusaron el uno al otro de arrastrar el debate hacia el pasado. “No fueron 30 mil”, insistió Villarruel. En el último mano a mano, Rossi le preguntó por su presencia en las marchas de Cecilia Pando para pedir por la liberación de los represores mientras que Villarruel le preguntó si mentía al recordar el espionaje de un supuesto agente de la AFI –que él dirigía- en connivencia con funcionarios o dirigentes del oficialismo. Ambos se acusaron de mentir y se vieron ganadores.
“Se mimetizó con Milei”
En la previa, en el massismo había preocupación por la aptitud discursiva de la rival de Rossi. En el equipo del jefe de Gabinete destacaron que Villarruel evitó las propuestas. “Ella se mimetizó con Milei, no defendió sus consignas, no fue propositiva y habló enojada desde el odio”, se diferenciaron.
Los libertarios festejaron el desempeño la diputada. “Desnudó las falencias y las mentiras del discurso K. Es quien mejor sintonizó con el electorado que no votó a ninguno de los dos”, explicaron.
A dos metros de distancia, los cerca de 30 acompañantes de cada bando se fotografiaron. Los peronistas llevaban un pañuelo de las Madres de Plaza de Mayo. Los mileístas, más ruidosos cantaron por su candidata.