Una alumna habría llevado pastillas con benzodiazepinas -el componente de las pastillas para dormir- y las habría mezclado con agua, que luego repartió entre sus compañeros. El silencio oficial se extiende.
Mientras el silencio impuesto por las autoridades escolares reina en Buena Esperanza crece la hipótesis de que la causa por el desvanecimiento masivo de más de 40 chicos en la escuela Luisa Fantini Cortez Aparicio se debió a una intoxicación con ansiolíticos. Aparentemente, una alumna del establecimiento habría llevado pastillas con benzodiazepina y las habría mezclado con agua para repartirlas entre sus compañeros.
La ingesta de las pastillas para dormir habría provocado el desmayo y el caos en el establecimiento el miércoles a la mañana. Lo curioso es que 48 horas después no haya comunicado oficial del colegio ni del ministerio de Educación y se permita que las especulaciones crezcan.
Primero el desayuno que recibieron los chicos y luego un escape de gas fueron las primeras teorías que circularon entre los preocupados padres, que el jueves ingresaron por la fuerza a la escuela para exigir explicaciones. A algunos ninguna de las dos hipótesis les cerraba del todo.
Al parecer la razón del desvanecimiento de los chicos fue una preparación que una alumna les habría convidado que contenía pastillas con ansiolíticos disminuidas en agua. No se sabe si los chicos tomaron la bebida conscientes o engañados, aunque una fuente cercana a la investigación dijo que una adolescente que está internada “se quebró” y contó lo que había sucedido.
Eso habría provocado desmayos, ataques de llanto, debilidad muscular y otros síntomas que generaron un caos en la escuela, con ambulancias saliendo sin freno de la escuela al hospital.